Cuando hablamos de juego simbólico, las cocinitas y los mercados son dos de los grandes favoritos, y este de Little Dutch, con sus colores pastel y carteles de pizarra, no puede ser más bonito.
Está hecho de madera resistente e incluye una pizarra de tiza y 4 cajas de madera con 10 piezas de fruta y verdura blanditas.
Entorno a los dos años, las/os niñas/os comienzan a jugar a, empleando la imaginación, imitar y reproducir el mundo: lo que hacemos los adultos, lo que ven a su alrededor… Es la gran explosión del juego simbólico o de imitación, que irá volviéndose cada vez más complejo y se extenderá aproximadamente hasta los 7 años de edad (las edades variarán en función de cada peque)
El juego simbólico posee una gran importancia en el desarrollo de los/las niños/as, porque les permite comprender y asimilar el entorno en el que viven. En el caso del juego de las tiendas o mercados, además, podemos favorecer:
- La empatía, al ponernos en el lugar del otro mientras desarrollamos el juego de rol
- El lenguaje
- Conceptos matemáticos: pesar, contar, clasificar, restar y sumar…
- El conocimiento de los alimentos y la alimentación saludable
- Expresar emociones
- Imaginación y creatividad
- Interacción y sociabilidad
- La motricidad y la motricidad fina